En el mundo de Harry Potter, caracterizado por la existencia de la magia, hay una gran variedad de competiciones en donde los magos buscan probar quién es el más talentoso, habilidoso o quien tiene mejor control sobre la magia y sus distintas disciplinas. Una de estas competiciones, que resulta ser bastante importante durante la formación de magos y brujas, es el torneo de los Tres Magos, ya que en él se busca determinar cuál es la escuela de magia de Europa más poderosa o que tiene los magos más talentosos.

Por ello, se creó este torneo en el que compiten las escuelas más importantes de Europa como lo son el Instituto Durmstrang, el colegio de magia de Hogwarts y la Academia Beauxbatons. En esta artículo, hablaremos sobre el torneo celebrado durante el cuarto libro, Harry Potter y el cáliz de fuego. Se trata de la edición número 350 del torneo, celebrada en Hogwarts en 1994, y, que tuvo a 4 participantes en lugar de 3. A lo largo del artículo veremos como fueron las tres pruebas y cómo fueron superadas por cada uno de los participantes.

Selección de los participantes

La ceremonia de elección de los participantes del Torneo de los Tres Magos tuvo lugar el 31 de Octubre. A lo largo de los días, los estudiantes mayores de 17 años podían meter su nombre en el cáliz para ser elegidos, seleccionando el cáliz 3 nombres, uno perteneciente a cada escuela. Por parte del Instituto Durmstrang, Viktor Krum, por parte de la Academia Beauxbatons, Fleur Delacour, y, por parte del colegio de magia y hechicería de Hogwarts, Cedric Diggory.

No obstante, el cáliz expulsó un cuarto nombre, Harry Potter, siendo un suceso que no había ocurrido en ninguna de las 349 anteriores ediciones. Gran parte de la gente creía que Harry Potter quería llamar la atención, pues solamente tenía 12 años, pero, finalmente fue inscrito en el torneo junto al resto de campeones. Con posterioridad, se descubriría que Barty Crouch Jr., bajo el aspecto de Alastor Moody, fue el encargado de trucar el calíz.

Prueba inicial: Huevos de oro

La primera prueba en el torneo de los Tres Magos tenía por objetivo conseguir un huevo de oro, una tarea que podría parecer sencillo. No obstante, este huevo de oro estaba colocado estratégicamente en un nido de dragón hembra, con la finalidad de que esta lo cuidase como si fuera uno más de sus huevos. Cada uno de los participantes del torneo tuvo que enfrentarse a un dragón distinto al azar, siendo:

  • Cedric Diggory: Hocicorto sueco, un dragón de piel azul y plata, con una brillante llamarada azulada.
  • Fleur Delacour: Galés verde común, un singular dragón de color verde esmeralda, de tamaño medio, y, con un rugido melódico.
  • Viktor Krum: Bola de fuego chino, un dragón oriental de color escarlata, con una llamarada redondeada que lanza cuando está enfadado.
  • Harry Potter: Colacuerno húngaro, un dragón enorme de color negro o marrón, que lanza una poderosa llamarada de fuego.

Fleur Delacour decidió dormir al dragón con un hechizo en el que puso en trance a la criatura. Por otro lado, Viktor Krum optó por usar un embrujo por el que enfermó a la dragona. La dragona, tambaleándose, rompió alguno de los huevos reales, y, esto llevó a la penalización del campeón del instituto Durmstrang. Con respecto a Cedric Diggory, recuperó el huevo de oro al despitar al dragón, convirtien en perro una piedra cercana. Harry Potter lo tuvo más difícil, ya que, el dragón colacuerno húngaro se escapó, y, Harry debió invocar su saeta de fuego, una veloz escoba, para maniobrar y recuperar el huevo de oro.

Segunda prueba: Enigma del huevo

Para la segunda prueba, era necesario que cada uno de los participantes lograra desvelar el misterio de sus respectivos huevos de oro. El enigma del huevo resultó ser una canción que únicamente podía sonar cuando el huevo estaba dentro del agua, haciendo que los participantes descubrieran que dicha prueba tendría lugar debajo del agua. Cada participante logró descubrir el secreto de diferente forma, pero, al comenzar la segunda prueba, todos se dieron cuenta de que tendrían que rescatar a uno de sus seres queridos de las profundidades del Lago Negro.

  • Harry Potter debía salvar a Ron
  • Viktor Krum debia salvar a Hermione
  • Fleur Delacour debía salvar a su hermana Gabrielle
  • Cedric Diggory debía salvar a Cho Chang

Para lograr rescatar a sus amigos, era necesario sumergirse en el lago negro a una gran profundidad, por tanto, no tendrían la oportunidad de respirar cómodamente. Cada uno tuvo que conjurar un hechizo o utilizar un artefacto que le permitiera respirar debajo del agua. Harry Potter utilizó las branquialgas que le otorgaron branquias para respirar bajo el agua, Cedric Diggory y Fleur Delacour utilizaron el casco-burbuja, mientras que, Viktor Krum optó por transformarse en una especie de tiburón. Todos fueron salvando a sus seres queridos, salvo Fleur. En ese momento, Harry Potter optó por sacar tanto a Ron como a Gabrielle, salvando la vida de la joven.

Última prueba: Laberinto

Pruebas Del Torneo De Los Tres Magos

Como tercera y última prueba, los participantes del torneo tendrían que llegar al centro de un enorme laberinto en donde se encontraba la copa de los Tres magos, siendo el primero que la tocase el ganador. Este laberinto, que recuerda a otros laberintos famosos como el Laberinto de Villapresente, escondía un sinfín de particularidades. Esta última prueba fue bastante complicada para todos los participantes, debido a que el laberinto era de un tamaño considerable, cambiada de forma, y, estaba lleno de trampas y peligros.

Es importante mencionar que todos los participantes fueron atacados para intentar inhabilitarlos, para que estos no lograran tocar el objetivo. Viktor Krum fue sometido a la Maldición Imperius por parte de Barty Crouch Jr., y, obligado a atacar a Fleur Delacour y a Cedric Diggory. Cedric fue ser salvado por Harry, haciendo un pacto en donde compartirían el premio.

Harry y Cedric tocarían la copa al mismo tiempo, que resultaró ser un traslador. El traslador llevó a los protagonistas al cementerio de Little Hangleton, lugar en el que Voldemort renació, y, Cedric fue asesinado por su secuaz, Peter Pettigrew. Para poder escapar, Harry se enfrentó a Voldemort, y, gracias al encantamiento Priori Incantatem, consiguió la ayuda de los espirítus de su padre, del propio Cedric y demás magos y brujas, pudiendo tomar de nuevo el traslador, y, regresando con el cadáver de Cedric.